EDIFICIOS
COLONIALES EN OAXACA
Oaxaca es una
ciudad fundada por los españoles hacia el siglo XVI, por ello en el llamado
Centro Histórico, encontramos infinidad de edificios coloniales, religiosos y
civiles, es decir, inmuebles construidos durante los tres siglos de dominación
hispana y aunque a decir verdad son obra del esfuerzo y sufrimiento de nuestra
gente, en la actualidad forman parte de nuestro valioso acervo artístico
cultural.
Un recorrido por
las calles de nuestra otrora hermosa ciudad, nos permitirá percatarnos que la
base de su construcción es la famosa piedra de color verde jade que conocemos
con el nombre de cantera, la vemos utilizada como cimiento, como material
constructivo y como elemento decorativo, los constructores de la ciudad sabían
que su durabilidad y su belleza haría de nuestros edificios algo trascendente y
admirable.
Vivimos en una
ciudad plena de encantos y tradición, efectuar un recorrido a pie, deleita
nuestros sentidos y nos permite apreciar la belleza arquitectónica de Oaxaca.
Sin embargo, como
se dice comúnmente, “no falta un pelo en la sopa”, al constatar con preocupación
y congoja, las agresiones físicas de que son objeto
los venerables edificios coloniales de nuestra urbe.
Al ser esta ciudad,
cuna de movimientos de protesta (aquí se protesta por todo y contra todo; “hasta
por que se nos pare una mosca”, decían los ancestros), por consiguiente, tanto
los pobladores como los edificios están sujetos al vandalismo de las hordas
incultas que violentan la integridad
física de gente y edificaciones. Con infinita tristeza y enorme disgusto, hemos sido testigos durante estas últimas tres décadas
y un poco más, de atentados criminales a casonas, templos y edificios civiles,
consistentes estos en severas mutilaciones a la cantera para utilizarlos como
proyectiles, pintas de consignas sobre venerables edificios y quema irracional
de portones y sitios culturales.
Aunado a esto los efectos causados por los
elementos naturales; flora nociva, sismos, tormentas y hasta la acción
destructora de irracionales (aves), nuestro patrimonio edificado
está en grave
riesgo de desaparecer y con ello la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad,
otorgado por la ONU en atención a su rico legado histórico, arquitectónico y
cultural.
Aquí las
autoridades correspondientes, y principalmente el INAH tienen mucho que ver e
intervenir, por supuesto que el pueblo que es el auténtico propietario de estas
reliquias, estamos obligados a actuar de forma consciente y responsable.
Es urgente hacer
algo serio y pronto…!